Vemos muchos casos de empresas y figuras públicas que no tienen acceso al nombre de usuario con su nombre real porque alguien lo cogió antes.
Es decir, si la empresa se llama “Abc”, puede que el usuario con ese nombre ya exista, de manera que la compañía tiene que buscar la manera de conseguirlo.
Eso implica llegar a un acuerdo con el dueño, abrir una cuenta con otro nombre de usuario distinto o pensar en otra manera de obtenerlo. Lo que no sería necesario si el nick estuviera disponible.
Un ejemplo serían los hoteles Meliá, que no poseen el nick en Twitter en español, más bien está redactado con la estructura propia del inglés.
Lo que quiere decir que primero va el nombre de la empresa y después a lo que se dedica.
Una opción es contactar con la persona que creó la cuenta y ofrecerle dinero a cambio del nick, pero no siempre es posible.
Quizás quién la haya generado ya no esté pendiente de la cuenta o sencillamente ha fallecido.
Por lo general, la única manera de contactar es a través de la misma cuenta, que podría tenerla configurada para que no le aparezcan notificaciones, ni le lleguen mensajes directos.
Esta situación no es exclusiva de las redes sociales, puesto que cuando se iniciaron las páginas web, algunas personas o empresas registraron dominios con nombres de compañías que no les pertenecían.
Hay que estar atentos a cualquier medio que pueda surgir para evitar que otro llegue primero, aparte de revisar las plataformas de inversión, para visualizar oportunidades de negocio o posibilidades de generar ingresos extra.
Lo que pasaba con los dominios era que en internet no existe una regla o ley que solo permita al legítimo dueño de una empresa abrir una página web con su nombre.
De manera que cualquiera podía generar un dominio con el nombre de la empresa más reconocida sin problema.
A raíz de esto, algunas compañías internacionales se vieron en la necesidad de desembolsar grandes cantidades de dinero a cambio de tener su página web.
Lo que demuestra que este fenómeno no se originó con las redes sociales.
Qué esperanza existe para recuperar un nombre de usuario?
En ocasiones se puede conseguir el nombre de usuario sin realizar muchas gestiones, siempre y cuando se cumplan ciertas condiciones.
Por ejemplo: si la cuenta está inactiva desde hace mucho tiempo y otra persona la solicita (y promete hacer uso de ella), la red podría asignársela.
El negocio de las redes sociales es crear comunidades de personas activas, que publiquen actualizaciones con mucha frecuencia, sobre lo que hacen, los lugares que visitan o la gente que conocen.
En definitiva, el mundo ha cambiado.
Antes no había una actividad tan frenética en el ámbito online, de hecho, ni siquiera existían aparatos aptos para conectarse a páginas web y quedarse mucho tiempo.
Los avances tecnológicos han servido para cambiar las dinámicas y las experiencias de usuario, replanteando así las estrategias comerciales de las marcas y la forma en la que las personas interactuamos entre nosotros.
En el futuro existirán nuevos métodos más ágiles y fáciles de comunicarnos con la gente que más nos importa, además de poder segmentar los grupos a los que pertenecemos, como los compañeros de trabajo, familiares, etc.
